
La hipertensión arterial, también conocido como el asesino silencioso, es una enfermedad relacionada directamente con problemas cardiovasculares. Dicha enfermedad puede intensificar el daño en cualquier parte de las arterias del cuerpo, volviéndose rígidas y estrechas, dando como resultado la disminución de la circulación sanguínea hacia los órganos vitales (cerebro, corazón, riñones, entre otros). La elevación de la presión arterial también puede provocar la obstrucción aguda de una de las arterias al nivel del corazón pudiendo provocar infarto agudo de miocardio.
¿Cómo se mide?
La presión arterial se mide gracias a un esfingomanómetro, popularmente conocido como tensiómetro, este puede ser manual o electrónico. Antes de usarlo, sigua las siguientes recomendaciones:
- La presión arterial cambia a lo largo de la mañana y de la noche. Se recomienda realizar 2 o 3 medidas durante todo el día.
- Busca una habitación tranquila, sin ruidos, ni interrupciones.
- Evitar estrés físico o emocional 15 min. antes de la toma.
- Siéntate cómodamente con la espalda apoyada en el respaldo de la silla, sin cruzar las piernas.
- No hables durante la medición.
- Apunta los valores obtenidos para informar a tu médico.

Dato:
- Una presión arterial normal es: menor a 120/80 mm Hg la mayoría de las veces.
- Una presión arterial alta (hipertensión arterial) es cuando uno o ambos valores de la presión arterial (Sistólica y Diastólica) son mayores o iguales a 140/90 mm Hg.
- Se denomina pre hipertensión arterial cuando los valores de la presión arterial sistólica se encuentran en el rango de 120 a 139 mm Hg y/o los valores de la presión arterial diastólica se encuentran entre 80 a 89 mm Hg, si presenta estos valores debe consultar a su medico.